Otro día de entrenamiento, sólo queda mañana y ya nos vamos a la Vía Verde de la Subbética en la provincia de Córdoba. Siempre pensando en la Vía de la Plata que haremos en el mes de julio.
La salida de hoy fue la misma que la de ayer, siempre enfocados en el juntar kilómetros de fondo y en adquirir la sensación de rodar en bicicleta un día tras otro, un no parar.

En este post quería responder una pregunta que he recibido por mail. Me preguntaron si suelo viajar con equipo de apoyo.
Nunca me gustó viajar con equipo, furgoneta y otras ayudas.
Para mi viajar en bici es viajar con tu casa y tu mundo en las alforjas. Por eso digo que no es lo mismo, el cicloturismo con ayuda es respetable pero para mi es simplemente salir a tomar el aire o pasear. Un viaje en bicicleta es otra cosa muy distinta.
Cuando pedaleas sin peso, con un mecánico siempre disponible y con tu ropa y demás pertenencias en una furgoneta unos metros por detrás estás controlado. Te están cuidando en todo momento y no eres lo que para mi es un verdadero cicloviajero, una persona sola frente a todo lo que puede encontrar en cada curva del camino.
Cicloturismo con alforjas
Lo bueno de viajar con todo en las alforjas es que eres completamente libre. A tu ritmo y a tu manera haces tu propio camino y no el que te marcan otros. Vives en completa libertad sobre la bicicleta cuando no estás obligado a llegar a un lugar determinado para dormir en un albergue municipal o en un cómodo hotel de 4 o 5 estrellas. Eres libre cuando decides dormir en cualquier lugar del próximo pueblo o al aire libre. ¿Existe una experiencia más bonita que dormir en mitad de la nada mirando «un techo» con millones de estrellas? Si no lo hiciste nunca, debes probarlo.
Siempre he dicho y lo mantengo, la experiencia de viajar con alforjas sin apoyo es una prueba personal. Es una experiencia en la que podrás conocerte y encontrar dentro de ti las respuestas que estás buscando.
Hacer un viaje en bicicleta programado o con apoyo es «no salir del nido». Es seguir cogido a la «seguridad» que te ofrece todo lo conocido.
Viajar con tu casa a cuestas es la experiencia más enriquecedora posible.
¿Qué opinión tienes al respecto? Me gustaría conocer tu punto de vista, si deseas compartirlo por favor deja un comentario. Muchas gracias.
Acabo de leer tu artículo y lo comparto al 100 x 100, probé con apoyo y lo hice sin el, mejor con. La libertad de elegir cadencia y lugar donde reposar.
Un abrazo.
Lo hicimos con mi esposo durante cinco años en época de vacaciones. Pocos kilómetros. 500, fue una hermosa experiencia. Dormíamos dos noches en la ruta porque íbamos despacio. Lo disfrutamos mucho y lo vamos a volver a hacer ahora que nos jubilados y tenemos más libertad.
Qué bien Ana! estoy seguro que si lo disfrutaste antes… ahora lo disfrutarás mucho más. El tiempo y el cambio de perspectiva te permitirán apreciar matices que antes -quizás- no supiste o pudiste ver. Ya me contarás más detalles de tus próximos viajes. Gracias de antemano amiga!
Querido compañero: quizás si o quizás no tengas razón, yo viajo con 5 amigos y no llevamos apoyo pero aprendí que tengo que descansar bien para seguir con la ruta. Por tanto en mis viajes tengo etapas programadas y necesito descansar en condiciones.
Muchas gracias Pablo por compartir tu punto de vista con todos nosotros, y bienvenido al blog.