Esta mañana despertamos muy temprano, la idea original era hacer una ruta que ya hicimos varias veces por la zona de Alfarnate, un pueblo interior de la provincia de Málaga.
Pero mientras desayunábamos decidimos hacer un cambio, salir en bici desde casa sin coger el coche ni el Flex-Fix.
“Nos dejamos caer” a la playa como y el dije a Yolanda que ella misma decidirá qué hacer, simplemente me puse a rueda de ella y me dispuse a seguirla.

En la playa giró a la izquierda con dirección Chiches / Benajarafe.
No había mucho viento, la playa y el sol estaban realmente bonitos.
Mientras la seguía a rueda nos pasaron infinidad de pelotones pero nosotros, siempre seguimos pedaleando a nuestro ritmo.
Llegamos a Chilches, pasamos por Benajarafe y Yolanda no mostraba signos o deseos de volver, un ratito después alcanzábamos Almayate.
En bicicleta hacia la Caleta de Vélez por la Costa Oriental de Málaga
Seguimos la recta y llegamos a Torre del Mar y entramos en el pueblo con la idea de recorrer su paseo marítimo.
Pero al llegar al final Yolanda siguió pedaleando…
Siempre por el paseo marítimo a un ritmo completamente “Zen” llegamos a la Caleta de Vélez y seguimos hasta Algarrobo-Costa.
De pronto entrábamos en Mezquitilla, pasamos por la Marisquería Camary (muy recomendable por cierto) y paramos en la puerta La Viuda, otro de los sitios donde habitualmente vamos a comer pescado.
Habíamos pedaleado 22 kilómetros.
Bebimos un poco de agua y comenzamos la vuelta.
Un rato después llegábamos a casa con casi 45 kilómetros.
Ducha… y aquí estoy, mirando el directo de la última etapa de la Vuelta a Cataluña por Eurosport Player para luego hacer lo mismo con otra de las clásicas de Bélgica, la Gent-Wevelgem.
El fin de semana que viene, más bici y más pedales.
¡Gracias!
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